Todo arrancó de muy mal humor el viernes tipo 21 hs en mi casa, mientras estaba en la ducha me di cuenta que claramente no tenía ni ganas de ir. Salí de la ducha y con una cara de orto tremenda, de esas de las mías que son inocultables, me sonó el celular: Mi chico…. Demasiado contento, una voz exultante que ya había llegado a la casa y quería saber a qué hora iba a salir para allá. Era su cumple y me esperaba en su casa rodeado de la Comunidad.
Yo había quedado que tipo 21:30 hs salía, sin embargo aun eran las 22:15 y seguía en casa. Hasta elucubré con una amiga por teléfono decirle que ella estaba muy mal para poder partir a mitad de la noche. Mi padre también se solidarizó conmigo y me dijo que sólo tenía que llamarlo, que él me iba a buscar a Lomas, en 40' estaba! Jajaja
En fin, junté valor y me fui a tomarme el 160. Para sorpresa viajè re bien, el camino no es para nada feo, había gente en el bondi pero pude sentarme ni bien subí y llegué perfecto. Me bajé en un lugar, que no es ni lindo ni feo pero es muy raro… no hay edificios y eso ya genera desconfianza. Para colmo de sopetón no más me fumé a la hermana mayor, la veterinaria que vino especialmente del interior para el cumple del nene!! Ahhhh noooooo, ni beso le di que ya tenía a la Dr. Queen de animalistos mirándome de arriba a bajo.
Llegamos al hogar:
Hermana 1: con marido y dos hijos
Hermana 2: con marido y una nena
Hermano: dos hijas de 20 y 21 años que lo deliraban a más no poder
Hermana 3: soltera y muy medio tonta
Hermana 4 : juntada y embarazada
Dr queen: marido e hija
Amigos: por 3 (que se fueron ni bien llegué así que solo hola y chau!)
Madre: que me arrinconó en un pasillo y sólo le faltó preguntarme el grupo sanguíneo.
Padre: dos mil años, por suerte se ve que había tomado vino porque se fue a dormir y casi no lo vi.
Tuve que soportar frases como éstas: “qué linda que es la nueva novia” ¿¿¿¿¿Nueva, qué onda??? (como si yo no estuviera ahí!)
los nenitos se mataban y las guachas de 20 y 21 les decían: "pórtense bien, no ven que el tío vino con la novia!!!"
Remate: me pusieron una caripela tremenda cuando dije que era de almagro… como si viviera en una villa. No estaban psicológicamente preparados para que no fuera de zona sur!!!! Mi casa es mucho mas linda, es un edificio, hay portera, abajo hay un kiosco que abre los domingo, llegan 20 líneas de colectivos y dos subtes…. No se metan con almagro que me ofuscooooo!!!!!!!!!!!!!!
Después a adrogué a tomar algo … no me gusta zona sur, me gusta la capital donde hay taxis, kiscos por todos lados y abiertos de noche, telos cada dos cuadras (esperamos una hora y media, no quedaba otra no había otro lugar donde dormir), y edificiossssssssssssssssssssssss
Lo peor es que él la pasó bárbaro, parece que me adoraron, que soy re simpática y muy linda y le encantó verme por sus pagos, estaba re feliz . No sé qué onda, pero está claro que no quiero ni aparecer por ese lugar… pero lo quiero a él. A él solito, bien huerfanito… ¿soy tan mala como me siento mientras escribo esta líneas?
miércoles, 20 de agosto de 2008
miércoles, 30 de julio de 2008
¿Conociendo a la comunidad?
No puedo conocer a su familia, se me complica…
Uhhhh!!! Hace bocha que no escribo, es que se me complica ordenar las cosas que me pasan! En fin, para ponerlos al día, la última vez que subí algo estaba sentada en la puerta de un bar esperando, ¡por cuarta vez!, a un chico.
Las citas continúan, me cuesta creer que así sea pero parece que a este chico le gusto, es rarísimo, no es que tenga problemas de autoestima, de hecho siempre fui muy segura de mí misma pero no le puedo gustar tanto!!!!!
Es muy loco porque no actúa como un hombre… cuando dice Sí es Sí, no es que su Sí encubre un No. Cuando me dice que me quiere ver, se toma un colectivo y me viene a ver ese mismo día; su “te quiero ver”, no viene con un “Pero” a continuación: pero… tengo fútbol, pero… estoy cansado , pero… tengo el cumple de un amigo.
Cuando dice A es A, ¿eso no es muy loco? Para mí que ya ni siquiera es que no cataloga como un hombre cualquiera sino que no cataloga como miembro de la raza humana.
Ahora bien, es sincero (al menos eso parece) pero…. Y sí, hay un pero. Se me está complicando. A mi me gusta, de hecho él está re bueno. Cuando estamos juntos la paso genial y quedo siempre satisfecha, con todo… que se entienda bien, se puede hablar con él sin que mi cerebrito explote cada vez que lo escucho. A veces me explota, me ha pasado de salir con chicos y pensar: ¿qué onda, este pibe no tiene amigos? ¿ no tiene nadie que le diga que es un tarado y que no sabe ni armar una oración? Me enferma no poder hablar con el otro, me revuelve el estómago el solo hecho de estar pendiente de lo que va a decir, como si cada conversación se viera envuelta un una plegaria constante donde desde mi cerebro se expulsa un prédica que dice : “por favor que no lo diga, por favor que no lo diga, por favor…”.
Pero eso no me pasa con él, con él es distinto, el está muy bien pero sólo él. Ya conocen de mis fobias al compromiso y de mi poca facilidad para subir en la escalera imaginaria de una relación. Él quiere más, se le nota en la carita, parece el gatito de Shrek cuando abre esos ojazos!!! Yo me doy cuenta que me está por decir algo todo el tiempo y cuando abre la boca a mí me surge esa expresión tremenda en mi cara. Esa cara fría que sólo con la mirada le está diciendo: “ojo, adónde vas?????”
Es tremendo porque está frenado… se censura… No, yo lo censuro, me hace sentir fatal pero no me nace. Yo no llegué a este mundo equipada para gritar a los cuatro vientos mi amor.
La situación empeora porque la semana que viene es su cumple años, ya me lo dijo, él quiere que yo esté ahí. Estar ahí significa conocer a la comunidad (su familia). ¡Cómo hago para conocer a su familia si ni sé que tipo de relación tenemos!!!! No sé qué va a ser de mí, no sé si alguien me pueda ayudar… obviamente intenté hablar con mis amigas pero resulta que antes de empezar a desmenuzar el tema, para ellas fue mucho más importante escupirme en la cara su vida agitada de estudiantes, lo mal que se llevan con sus novios o lo terrible de la relación amorosa de su padre ya separado de su madre y casado con una tremenda arpía con un hijo insoportable. Sí, así de juntito casi sin respirar.Y yo, yo qué hago??? AYUDAAAAAAAAAA
Uhhhh!!! Hace bocha que no escribo, es que se me complica ordenar las cosas que me pasan! En fin, para ponerlos al día, la última vez que subí algo estaba sentada en la puerta de un bar esperando, ¡por cuarta vez!, a un chico.
Las citas continúan, me cuesta creer que así sea pero parece que a este chico le gusto, es rarísimo, no es que tenga problemas de autoestima, de hecho siempre fui muy segura de mí misma pero no le puedo gustar tanto!!!!!
Es muy loco porque no actúa como un hombre… cuando dice Sí es Sí, no es que su Sí encubre un No. Cuando me dice que me quiere ver, se toma un colectivo y me viene a ver ese mismo día; su “te quiero ver”, no viene con un “Pero” a continuación: pero… tengo fútbol, pero… estoy cansado , pero… tengo el cumple de un amigo.
Cuando dice A es A, ¿eso no es muy loco? Para mí que ya ni siquiera es que no cataloga como un hombre cualquiera sino que no cataloga como miembro de la raza humana.
Ahora bien, es sincero (al menos eso parece) pero…. Y sí, hay un pero. Se me está complicando. A mi me gusta, de hecho él está re bueno. Cuando estamos juntos la paso genial y quedo siempre satisfecha, con todo… que se entienda bien, se puede hablar con él sin que mi cerebrito explote cada vez que lo escucho. A veces me explota, me ha pasado de salir con chicos y pensar: ¿qué onda, este pibe no tiene amigos? ¿ no tiene nadie que le diga que es un tarado y que no sabe ni armar una oración? Me enferma no poder hablar con el otro, me revuelve el estómago el solo hecho de estar pendiente de lo que va a decir, como si cada conversación se viera envuelta un una plegaria constante donde desde mi cerebro se expulsa un prédica que dice : “por favor que no lo diga, por favor que no lo diga, por favor…”.
Pero eso no me pasa con él, con él es distinto, el está muy bien pero sólo él. Ya conocen de mis fobias al compromiso y de mi poca facilidad para subir en la escalera imaginaria de una relación. Él quiere más, se le nota en la carita, parece el gatito de Shrek cuando abre esos ojazos!!! Yo me doy cuenta que me está por decir algo todo el tiempo y cuando abre la boca a mí me surge esa expresión tremenda en mi cara. Esa cara fría que sólo con la mirada le está diciendo: “ojo, adónde vas?????”
Es tremendo porque está frenado… se censura… No, yo lo censuro, me hace sentir fatal pero no me nace. Yo no llegué a este mundo equipada para gritar a los cuatro vientos mi amor.
La situación empeora porque la semana que viene es su cumple años, ya me lo dijo, él quiere que yo esté ahí. Estar ahí significa conocer a la comunidad (su familia). ¡Cómo hago para conocer a su familia si ni sé que tipo de relación tenemos!!!! No sé qué va a ser de mí, no sé si alguien me pueda ayudar… obviamente intenté hablar con mis amigas pero resulta que antes de empezar a desmenuzar el tema, para ellas fue mucho más importante escupirme en la cara su vida agitada de estudiantes, lo mal que se llevan con sus novios o lo terrible de la relación amorosa de su padre ya separado de su madre y casado con una tremenda arpía con un hijo insoportable. Sí, así de juntito casi sin respirar.Y yo, yo qué hago??? AYUDAAAAAAAAAA
miércoles, 14 de mayo de 2008
Síndrome de Pensamiento Excesivo
Tengo cierto problemitas con el compromiso, sí me cuesta!!!
La primera cita se desarrolla con normalidad, busco conocer al otro y me armo un personaje de chica bien. Esas que escuchan todo lo que tienen para decirle y se ríen adecuadamente de cada chiste malo que le cuentan. Incluso me ocupo de que cuando está finalizando la noche sobrevuele la posibilidad de en encuentro pasional… como para instalar la tensión y que haya otra cita.
La segunda salida se complica un poquito más… ¿Cómo lo saludo? ¿Le como la boca? ¿Beso en la mejilla? No, mejor beso en la comisura de los labios… De lejos uno de los peores momentos de todos!!!!! Después me relajo un toque, intento recordar todo lo que me dijo en la última cita para no volver a preguntar lo mismo y pecar de desinteresada. Y si todo va bien quizás le abra la puerta para que me quiera llevar a un lugar más tranquilo.
En la tercera… se pudre todo, si la noche de pasión estuvo buena me asusto. Si no cumplió mis expectativas también me asusto, pienso que soy un monstruo, qué desubicada!!!, eso no es lo único que importa, quizás estaba nervioso. Y la verdad… huyo despavorida, nunca llego a la cuarta cita!!
Después de mucho analizar este temita, obviamente sola porque como saben a mí nadie me escucha lo suficiente como para poder desembuchar todo esto, llegué a la conclusión que la del problema soy yo.
Resulta que tiendo a analizar todo, a pensar de más… sí, es que sufro del Síndrome de Pensamiento Excesivo. Que no se malinterprete, suele pensarse que las mujeres ya nos vemos vestidas de blanco en la primera cita y nos imaginamos los nombres de los tres crios que queremos tener, a mí me pasa lo contrario. Me enfermo de solo pensar en tener que levantarme con alguien al lado, entregar mi amado control remoto o negociar el dominio del equipo de audio. No puedo soportar la idea de que alguien me llame tres veces por día, me mande mensajes de texto melosos o pretenda desplazar la lectura del diario matinal por una charla conyugal. Ni hablar de la innecesaria pero cada vez más común presentación de mamá, papá, hermanos y hasta el fucking perro (odio a los animalitos!!!)
No suelo llegar a la cuarta cita… pero el sábado pasado descubrí que había contado mal y me encontré sentada en la puerta de un bar en Palermo a punto de ver por cuarta vez al mismo chico… Un momento terrible, ya les contaré…
La primera cita se desarrolla con normalidad, busco conocer al otro y me armo un personaje de chica bien. Esas que escuchan todo lo que tienen para decirle y se ríen adecuadamente de cada chiste malo que le cuentan. Incluso me ocupo de que cuando está finalizando la noche sobrevuele la posibilidad de en encuentro pasional… como para instalar la tensión y que haya otra cita.
La segunda salida se complica un poquito más… ¿Cómo lo saludo? ¿Le como la boca? ¿Beso en la mejilla? No, mejor beso en la comisura de los labios… De lejos uno de los peores momentos de todos!!!!! Después me relajo un toque, intento recordar todo lo que me dijo en la última cita para no volver a preguntar lo mismo y pecar de desinteresada. Y si todo va bien quizás le abra la puerta para que me quiera llevar a un lugar más tranquilo.
En la tercera… se pudre todo, si la noche de pasión estuvo buena me asusto. Si no cumplió mis expectativas también me asusto, pienso que soy un monstruo, qué desubicada!!!, eso no es lo único que importa, quizás estaba nervioso. Y la verdad… huyo despavorida, nunca llego a la cuarta cita!!
Después de mucho analizar este temita, obviamente sola porque como saben a mí nadie me escucha lo suficiente como para poder desembuchar todo esto, llegué a la conclusión que la del problema soy yo.
Resulta que tiendo a analizar todo, a pensar de más… sí, es que sufro del Síndrome de Pensamiento Excesivo. Que no se malinterprete, suele pensarse que las mujeres ya nos vemos vestidas de blanco en la primera cita y nos imaginamos los nombres de los tres crios que queremos tener, a mí me pasa lo contrario. Me enfermo de solo pensar en tener que levantarme con alguien al lado, entregar mi amado control remoto o negociar el dominio del equipo de audio. No puedo soportar la idea de que alguien me llame tres veces por día, me mande mensajes de texto melosos o pretenda desplazar la lectura del diario matinal por una charla conyugal. Ni hablar de la innecesaria pero cada vez más común presentación de mamá, papá, hermanos y hasta el fucking perro (odio a los animalitos!!!)
No suelo llegar a la cuarta cita… pero el sábado pasado descubrí que había contado mal y me encontré sentada en la puerta de un bar en Palermo a punto de ver por cuarta vez al mismo chico… Un momento terrible, ya les contaré…
martes, 13 de mayo de 2008
Roberto Carlos: no te envidio
A cierta edad los sucesos pasan frenéticamente y es muy común que el tiempo no alcance para expresar todo lo que nos pasa. A cierta edad, mejor dicho a la mía, los sucesos se van encadenando. Me pasan muchas cosas pero no es que no tengo tiempo para contarlas, NADIE ME QUIERE ESCUCHAR!!!
No se confundan, soy amiga de mucha gente, tengo un lindo grupo que sé que me quiere y mucho. Pero resulta que el mundo hizo que por estos meses mis amigas y amigos se enfrascaran tanto en sus asuntos que ya ni reparan en mí.
“Hola Lola como estás?”, y cuando estoy a punto de vomitar mi horrible día, contar mi frustrado encuentro sexual del fin de semana o simplemente quejarme de puto bondi que me mojó los pantalones cuando cruzó la Avenida Rivadavia, me ganan de mano. Me escupen sus sus vidas sin importarles en qué delicada situación me encuentro... Loco, parecen mi vieja, no mis amigos!!!
Que no se mal interprete, yo los quiero y me importa lo que les pasa, pero me niego a aceptar que solo les alcance mi “todo bien y vos’”, y no quieran saber nada más de mi.
Definitivamente no quiero tener un millón de amigos, pero me conformo con algún alma caritativa que quiera opinar sobre mi… cómo decirlo… sí, sobre mi vida!!!
Soy una persona bastante normal, trabajo de lunes a viernes, intento ocuparme de mi y casi todos los días me aniquilo en un cinta en el gym, viendo como todas están mejor que yo. Sí, hasta la vieja que asiste a pilates y levanta su gamba hasta el techo sin siquiera mover un solo musculito de su maquillado rostro tiene mejor semblante que yo. Ahhh y estoy saliendo con un chico hace un tiempito y eso sí que me trastorna!!!!! Pero antes de dar más datos me gustaría saber si alguien va a estar allí del otro lado.
No se confundan, soy amiga de mucha gente, tengo un lindo grupo que sé que me quiere y mucho. Pero resulta que el mundo hizo que por estos meses mis amigas y amigos se enfrascaran tanto en sus asuntos que ya ni reparan en mí.
“Hola Lola como estás?”, y cuando estoy a punto de vomitar mi horrible día, contar mi frustrado encuentro sexual del fin de semana o simplemente quejarme de puto bondi que me mojó los pantalones cuando cruzó la Avenida Rivadavia, me ganan de mano. Me escupen sus sus vidas sin importarles en qué delicada situación me encuentro... Loco, parecen mi vieja, no mis amigos!!!
Que no se mal interprete, yo los quiero y me importa lo que les pasa, pero me niego a aceptar que solo les alcance mi “todo bien y vos’”, y no quieran saber nada más de mi.
Definitivamente no quiero tener un millón de amigos, pero me conformo con algún alma caritativa que quiera opinar sobre mi… cómo decirlo… sí, sobre mi vida!!!
Soy una persona bastante normal, trabajo de lunes a viernes, intento ocuparme de mi y casi todos los días me aniquilo en un cinta en el gym, viendo como todas están mejor que yo. Sí, hasta la vieja que asiste a pilates y levanta su gamba hasta el techo sin siquiera mover un solo musculito de su maquillado rostro tiene mejor semblante que yo. Ahhh y estoy saliendo con un chico hace un tiempito y eso sí que me trastorna!!!!! Pero antes de dar más datos me gustaría saber si alguien va a estar allí del otro lado.
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